El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha expresado su incapacidad para evitar que se utilicen fondos destinados a la ampliación del muro fronterizo con México. Afirmó que dichos fondos fueron asignados durante la administración de Donald Trump y que, legalmente, no pueden ser redirigidos para otros fines.
Esta decisión contradice las promesas de campaña de Biden, quien había afirmado que no se construiría «ni un pie más de muro» en la frontera durante su mandato. Sin embargo, las presiones tanto de republicanos como de ciudades gobernadas por demócratas debido a la llegada masiva de migrantes parecen haber influido en esta medida.
El anuncio se produce el mismo día en que altos funcionarios estadounidenses, como el secretario de Seguridad Interior Alejandro Mayorkas y el jefe de la diplomacia Antony Blinken, se encuentran en México para discutir temas relacionados con la migración y el tráfico de fentanilo.